LEY DE LA MENTE BLOG

 

La primera impresión siempre se queda grabada, para bien o para mal. Y las personas a menudo no dan una segunda oportunidad, en especial cuando se trata de sus productos y servicios favoritos: Por ello esta ley nos dice que hay que implantarse con fuerza en la mente del cliente, echar raíces y no salir. Así no importa quien más llegue, simplemente ya no hay lugar en la mente del cliente.

 

¿Por qué? Regresemos a la primera regla, si eres el primero, le meterás una idea a la audiencia ya imposible de sacar. Otra razón es la comodidad. Si una persona tiene antojo de un refresco, sabe que tiene muchas opciones para elegir, pero la que muy probablemente acudirá a su mente será Coca-cola, porque desde niños es lo que conocemos (¿han notado que no importa que ellos no la beban o que sea cualquier otro, los peques siempre le llaman “coca” al refresco? Bien jugado, Coca-cola).

 

 Pero ojo, por otra parte, el consumidor es curioso por naturaleza, y si tiene otras ofertas las va a checar, así que si bien el hecho de que tenga nuestro producto en la mente en el momento en que lo necesite, no quiere decir que ya no hay que esforzarse. Si ya estamos en su mente, hay que procurar que jamás nos olvide. 

 

¿Cómo? Tal como haríamos con una semilla. Nutrirla, darle agua, cuidar de ella. Esa semilla es la idea en la mente del cliente, la que prevalece sobre todas las demás y permite que te perciban por encima de cualquier otro. Así la presencia de tu marca en sus mentes nunca desaparecerá. 

Posted by Marketing22

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